Esta mañana se ha publicado la transcripción de mi intervención presentando nuestra iniciativa para llevar las Lonjas de la Corona de Aragón a la UNESCO.
Proposición no de ley relativa a la candidatura conjunta de las lonjas de la Corona de Aragón como Patrimonio Mundial, de CHA (Grupo Plurinacional Sumar). (Comisión de Cultura, 11/11/25).
El señor PUEYO SANZ: Muitas gracias, president.
Comparezco esta mañana para defender esta iniciativa de Chunta Aragonesista, Comuns, Més per Mallorca y Compromís y de todo el Grupo Plurinacional SUMAR que persigue que las lonjas de las ciudades de Zaragoza, Barcelona y Palma se incorporen a la declaración como Patrimonio Mundial de la Unesco de la Lonja de Valencia, la única ya inscrita, dado que las cuatro comparten valores históricos y arquitectónicos similares y que justifican su inclusión en la lista del patrimonio mundial.
La pasada primavera, la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, tuvo algunas ocurrencias, podríamos decir, que pusieron en peligro la lonja de Zaragoza. La mejor respuesta para detener esta amenaza, además de la movilización ciudadana masiva, es precisamente promover esta candidatura a patrimonio mundial, acudir a la Unesco. Ello va a obligar a las Administraciones públicas a proteger y conservar este edificio, que es un bien patrimonial único, que debe conservarse de manera rigurosa y con criterios técnicos y culturales frente a cualquier intento de alterarlo sustancialmente, como pretendía la alcaldesa de Zaragoza. Desde el punto de vista arquitectónico, la lonja representa uno de los mejores y de los pocos referentes que quedan de esa Zaragoza renacentista que fue conocida como la Florencia peninsular por la calidad y la cantidad de palacios, torres y edificios.
Los actuales países de la Corona de Aragón, de la antigua Corona de Aragón, no son solo comunidades autónomas aisladas y enfrentadas, como querría el españolismo y cierto catalanismo excluyente y burgués, sino que siguen siendo en la actualidad un suprasujeto cultural con ecos de confederación, una cooperación fraternal que resonó en pactos federalistas como el de Tortosa de 1869 frente al centralismo, una liga, un ligallo, como se dice en aragonés, que conserva rasgos culturales comunes en muchos ámbitos como tradición: lenguas, flujos migratorios, historia política y, por supuesto, arte, como en este caso.
Las cuatro grandes lonjas de los territorios históricos de la Corona de Aragón, repito, Barcelona, Valencia, Palma y Zaragoza, constituyen un conjunto arquitectónico de gran valor histórico, artístico y patrimonial. Se trata de edificaciones singulares en el contexto europeo que reflejan la importancia del comercio en los siglos medievales y modernos dentro de la Corona de Aragón y su influencia también en toda Europa. A pesar de representar diferentes estilos, desde el gótico en el siglo XIV al renacentista del siglo XVI, estas lonjas se construían siguiendo el mismo esquema: una sala de planta rectangular sostenida por columnas, que se concibieron precisamente como espacios para el intercambio mercantil y financiero, contribuyendo al auge económico y cultural de las ciudades en las que se emplazaban. Por ello ―esto es importante― debe conservarse y merece ser reconocido por la Unesco como Patrimonio Mundial con el fin de preservar su legado histórico y garantizar su protección y difusión a nivel internacional.
Estas cuatro lonjas de la Corona de Aragón representan en conjunto una manera de ver y organizar el comercio, de ver y entender la vida en un momento de pujanza y dominio económico en el Mediterráneo que lleva a una construcción distintiva y de uso único de los espacios para estas transacciones. Se crea, por ello, un espacio específico, diáfano en el que negociar, en lugar de aprovechar espacios públicos como los porches de las casas consistoriales. Esta característica común de las cuatro lonjas hay que conservarla, porque eliminarla o reducir este espacio, como proponía la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, es alterar gravemente ese concepto y arriesgar esa candidatura precisamente de la Lonja de Zaragoza como patrimonio mundial. Su estructura renacentista con elementos góticos tardíos la convierte en una obra arquitectónica excepcional dentro del panorama europeo. Por eso, debe conservarse y merece ser reconocido por la Unesco como Patrimonio Mundial.
Estas cuatro lonjas fueron declaradas Bien de Interés Cultural como monumentos nacionales en 1931. De ellas, solo la de Valencia ha sido ya reconocida como Patrimonio Mundial por la Unesco. Sin embargo, las restantes de Barcelona, Palma y Zaragoza no han obtenido aún esta distinción, pese a compartir esos mismos valores históricos y arquitectónicos similares que justifican su inclusión en la lista del patrimonio mundial. Fue el propio secretario de Estado de Cultura quien reconoció en su última comparecencia en esta comisión que pedir incluir las otras tres lonjas en esa declaración era la mejor manera de plantearlo y probablemente más sencillo que empezar de cero todo el procedimiento. Por eso, hemos empezado a promover iniciativas similares en las cuatro comunidades autónomas implicadas, con un trabajo, repito, fraternal y de solidaridad, como en las Cortes de Aragón, donde el pasado 4 de marzo, a iniciativa de Chunta Aragonesista, esta propuesta fue debatida y aprobada por unanimidad. Confiamos, por ello, en obtener hoy ese mismo respaldo unánime para reforzar esta tramitación ante el Consejo de Patrimonio Histórico.
Obviamente, también habrá que promover estudios y trabajos de investigación histórica, arquitectónica y cultural que refuercen la justificación de esta candidatura, poniendo en valor las características comunes que he desgranado y también las singulares de cada una de las lonjas, así como fomentar la colaboración entre las Administraciones locales y autonómicas de las ciudades implicadas para coordinar estrategias de protección, difusión y promoción del conjunto de las lonjas.
Por ello, pedimos el voto favorable de todos los miembros de la Comisión y por ello queremos también agradecer el trabajo realizado por Comuns, Compromís, Més per Mallorca y de Chunta Aragonesista.
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El señor VICEPRESIDENTE (Losada Fernández): Votamos el segundo punto. Proposición no de ley relativa a la candidatura conjunta de las Lonjas de la Corona de Aragón como patrimonio mundial.
Efectuada la votación, dio el siguiente resultado: votos a favor, 32; abstenciones, 3.
Queda aprobada.